Desde pequeña, la imaginación fue su compañera. Sumérgete en el proceso creativo de la videoartista, compositora, vocalista y guitarrista chilena Chini Ayarza.
Escrito por Camila González
Chini encuentra inspiración en el cruce semiótico de materiales y, para la poesía evocativa de sus letras, en conversaciones con personas, historias que escucha y gesticulaciones. Observa la cotidianeidad con ojos curiosios porque todo le llama un poco la atención. Para ella, la creatividad parte con el fluir con une misme.
En 2017 estuvo sobre el escenario de Ruidosa Fest SCL con Chini and The Technicians, conformada junto a Gabo Ardiles, Tiare Galaz, Sebastián Riffo y Roberto González. Su primer LP fue destacado en la lista de «Los 10 mejores discos latinos de 2018» de Rolling Stone EE.UU.
En paralelo, este año promete su primer EP como solista titulado «Ctrl z» bajo el nombre de Chini.png ¡Aquí un adelanto!
¿Qué es para ti la creatividad?
Creo que parte con el fluir con une, estar en comunión con une misme en la soledad, en la disciplina que sea y, por una vez, en la rutina no darse tan duro con el látigo. No juzgarse, darse más licencias, resolver por otros lados y olvidarse de las vergüenzas. Para mí son esos momentos de estar pensando a toda máquina pero solo en lo que hago, o estar sintiendo mucha pena y canalizarla despacito pero olvidándose de unx mismx. A veces es un estado de mucha calma, a veces en un estado febril, pero al empezar es por puro goce o dolor, sin miedo. Después viene el bajar, ordenar, editar y mostrar, que puede ser la parte más agotadora, pero nutritiva si se trabaja con otros. No siempre es necesario mostrar todo, de hecho a los artistas que más admiro son los que no muestran mucho, porque no tienen esa necesidad egoica y muchas veces tienen cosas más complejas o con más capas.
«Cuando unx es chicx es más creativx, por lo mismo, hay menos vergüenza. El miedo y los condicionamientos los vamos aprendiendo en el camino»
¿Desde cuándo te identificas como creativa?
Cuando unx es chicx es más creativx, por lo mismo, hay menos vergüenza. El miedo y los condicionamientos los vamos aprendiendo en el camino. Por mucho tiempo tuve una sensación de que ser creativa no era algo muy positivo, por no calzar con los niños de mi edad, pero creo que incluso eso solo profundizaba los mundos que me inventaba, si bien uno tiende a olvidar los detalles y solo quedan sensaciones.
Tengo recuerdos de estar inventando idiomas, haciendo comics interminables o jugar a ser un druida y tener mis tipos de “armas”, instrumentos, mis bolsitas con hierbas y hacer pociones, todo esto en Lo Orozco (pueblito de la V región). Yo, en verdad, pensaba que el bordado de un pulpo enojado de mi vecino estaba vivo, y le tenía pavor. También pensaba que la isla tortuga que había en el tranque en verdad era el fósil de una tortuga gigante. No fue hasta que entré a séptimo básico que entendí que probablemente tenía un problema en el circuito del interruptor de mi pieza, y no era que me estuviera visitando alguien de noche cuando se prendía la luz (aunque quien sabe). Es lo mismo que pasa con Santa Claus supongo. La imaginación es vista como una niñería y es la materia prima más valiosa de cualquier disciplina, artística o no. La idea es tener los conceptos claros para después poder quebrarlos con propiedad. Hasta el doctor para sospechar un diagnóstico de un síndrome raro tiene que partir por inventárselas un poco de colores y pensar fuera de los marcos del deber ser, o de lo que se supone que debiera ser.
Hay cosas que se van perdiendo y que lamento mucho, porque hoy son lo que más alimentan lo que hago. El instinto es una cosa y una siempre puede recurrir a él, pero soy de la impresión de que hay un espacio específico o finito donde uno guarda el mundo interior, y las cosas que botaste o olvidaste es casi imposible hacerlas volver.
Recuerdo que cuando alguien decía que vendría a verme mi prima Magdalena, entre la sonoridad de su nombre, su olor, y el color de su parka favorita, pensaba en una imagen muy específica de un rombo morado. El mismo lenguaje que vamos adquiriendo moldea las cosas, pero a la vez las vuelve inefables, como que suena a exageración, o a poco o a demasiado. Ahora solo recuerdo algunas impresiones más bien, pero hubo un montón de figuras, formas, modos que creo que todos perdemos porque no calzan con el sistema educativo, o porque no se ven bien en conversaciones con los compañeros y familia cuando uno se supone que tiene que parecer más “maduro” (raro concepto) de lo que uno en realidad es. Por lo mismo es importante cada ciertos años concentrarse en recordar los recuerdos. Mi papá, por ejemplo, tiene un recuerdo de estar en México y meterse a la ducha con calzoncillos y sentirse ridículo por mojarlos. Tenía 5 años en ese recuerdo y ahora tiene 60. Las emociones también pueden ayudarnos a recordar, y creo que en la nostalgia está mucho de aquello que nos hace personas más específicas o especiales y, por ende, creativas; independiente de que nos repitamos el recuerdo, porque nunca somos los mismos.
«En verdad todo me llama un poco la atención, por eso siempre llego tarde, me quedo mirando el reflejo de una poza o cualquier mierda y empiezo a tomarle fotos que después sé que no voy a usar»
¿En qué te inspiras para crear? ¿Cómo la estimulas?
Cuando chicxs jugábamos a poner la radio y los monos animados al mismo tiempo, y nos reíamos por horas cuando calzaba el perro patán con la voz que presentaba la radio Minería.
Aún juego a veces a poner películas y de fondo un programa, o un video de deportes con una canción que me gusta, generalmente así se me ocurren ideas. Guardo cosas en miles de discos y carpetas y después las cruzo. Igual ya todos los cruces semióticos que se pueden hacer se han hecho probablemente, pero no hace menos estimulante o entretenido, el intentar comprobar o hacer algo por uno mismo.
Para las letras, me inspiro en las conversaciones nutritivas que tengo con gente nueva o antigua en mi vida, las historias que escucho, la manera de expresarse de la gente, de repente ves a alguien gesticulando, caminando de una cierta manera o haciendo una mueca que no habías visto antes. En verdad todo me llama un poco la atención, por eso siempre llego tarde, me quedo mirando el reflejo de una poza o cualquier mierda y empiezo a tomarle fotos que después sé que no voy a usar.
¿Qué es lo más dañino para tu creatividad?
Tratar de que algo cuaje para los demás cuando ni yo lo entiendo bien. A veces debería ser más honesta y decir “cabrxs no tengo ni idea de porque estamos haciendo esto”. Quizás es una deformación profesional de haber estudiado arte tratar de a todo atarle un concepto más cerrado. También se vuelve un poco abrumador cuando tienes demasiadas herramientas a tu haber. Si nada te aprieta, quizás significa que ya te volviste un poco lo que odiabas. Yo detestaba mi trabajo en oficina, pero grababa al menos una idea musical por día escondida en el baño.
El ser humano se las ingenia para pillar esperanza, felicidad. Aún así, el opuesto a tener demasiadas herramientas y opiniones alrededor es mucho peor, la precarización, que es como vivimos muchas personas creativas, tratando de convencer de que lo que hacemos tiene valor, que deberíamos poder vivir de generar contenido cultural. Eso genera que estemos creando bajo considerables cuotas de estrés, que puede llegar a volverse insano.
¿Qué es lo más difícil de dedicarse profesionalmente a lo artístico?
Equilibrar los tiempos. Porque casi casi no da para vivir. Yo por mes hago cosas muy distintas, desde música para niños, afiches, diseño, montaje de videos para otras personas, dirección etc. Lo más difícil es no perder ese nexo con aquello que uno quería primordialmente hacer, es decir con la obra de uno, y desvivirse por la de los demás, creo que a todos los que hacemos algún quehacer artístico nos pasa. Lo importante es no quedar con la bala pasada y si te vas a entregar, o decir que puedes, hacerlo de corazón, porque los proyectos de los demás merecen esa consideración también.
«Lo más bacán de tocar música ha sido conocer tantos lugares y personas diferentes, y seguir desarrollando las amistades que ya tenía a través de las canciones»
¿Y la mayor gratificación o satisfacción?
Lo más bacán de tocar música ha sido conocer tantos lugares y personas diferentes, y seguir desarrollando las amistades que ya tenía a través de las canciones, las personas me inspiran amor, no me había dado cuenta, porque antes no validaba mis modos raros (crear canciones, videos etc, para entablar una conexión con los demás) como un tipo de amor también. Como un agradecimiento o decir “miren lo que aprendí gracias a ustedes”.
También es una gran satisfacción siempre terminar un proyecto grande, que antes no había nada de nada y ahora hay un videoclip o un disco, y saber que lo hicimos un grupo de amigos que confiaba mutuamente en el otro y sus capacidades. Me da mucha emoción conformar estos equipos, que la gente me diga “sí, démosle, me interesa trabajar contigo” a sabiendas de que no estudié música ni audiovisual y que hago todo un poco al 3 y al 4. Saber que voy a poder por un par de meses (o años jeje) empaparme, aprender, ver como ve ella o él y de ahí con suerte llamarlo mi amigo/a.
¿Qué otras mujeres creativas son referentes?
¡Uf todas! Nuestras mamás y abuelas jeje. Pienso en mi amiga Tiare, que además de ser niña tormenta (!) y su rescate de cosas cotidianas en las letras, tiene mucho talento en producir conciertos acústicos, hacer que el silencio, que el momento presente se luzca, que haya una cierta intimidad, supongo que también porque esto entra en comunión con su propia sonoridad y letras. También en Rosario Alfonso, otra amiga que toca el cuatro venezolano, y que nos conocimos estudiando arte, siempre fue muy buena, pero lo que rescato de ella es que verdaderamente se autocultivó a un nivel muy alto, aprendió a tocar cajón peruano también y es multi-instrumentista y hace cosas muy complejas.
No podría no mencionar a Pj Harvey, Bjork y St Vincent, mujeres que tienen una noción de artista integral, con todo lo que implica, el rol social, activista, la puesta en escena, el imaginario visual las sonoridades, la atmósfera. Una gran gran referente también es la Cami Moreno, la versión de “Maquinas sin dios” con Pangea me tuvo obsesionada durante meses. Me encanta en general las mujeres que se cranean con el tema de los ritmos, las síncopas, polirritmias o lo que sea, pero bajo un contexto de música popular. Por lo mismo también me gusta la banda trashkit, que tiene riffs con influencias africanas, y en Chile las hermanas Lia Nadja (“como el espacio soy”) y niñosindigo (“ambrosía” que de paso es en mi humilde opinión el mejor videoclip chileno). En lo visual siempre la dupla Maria Jose Tapia y Val Palavecino because es cosa de abrir las pepas <3 y ahorita último estoy trabajando con la Abril Sepulveda que me hace visuales para el show solista.
¿Cuáles son tus tipos de expresiones creativas (o medios artísticos) favoritos?
Me encantan los videoclips jejeje no voy a mentir. Son como Hanna Montana, tienen lo mejor de los dos mundos. Me encantan los que tienen danza, como el “I’m gay” de Eugene, me encantan esos híbridos, colaboraciones que no son ni lo uno ni lo otro. Me gusta la nueva puesta en escena de Kaki King, donde su guitarra blanca está fija y tiene video mapping encima y las proyecciones van reaccionando al sonido. También me encanta la pintura, admiro mucho a la gente que sabe pintar y me encantan algunos músicos clásicos, hacía trabajos con ellos en la universidad, como Mussorsky, Ligeti, con personalidad y a la vez rollientos.
¿Cómo describirías tu proceso creativo?
Parte mucho de admirar a otras personas, y de la procastinación. Si un día tengo que entregar un video, es muy probable que empiece ese día haciendo una maqueta de una canción nada que ver. O si tengo que terminar una maqueta (incluso si es de algo que me gustaba mucho el día anterior) empiezo a hacer un fanzine de poemas. No es bueno evitar cosas que uno tiene que hacer para poder vivir, pero si es bueno darse tiempos de ocio como algo muy muy serio (de hecho la palabra negocio es justamente la negación del “ocio”).
También me gusta complementar las cosas, si ya tengo un grupo de canciones, pensar distintos videos para cada una, aunque no los haga, después esas ideas las puedo usar para una sesión de fotos del proyecto de otras personas, u otra cosa, como que todo se retroalimenta un poquito.
De ahí viene la parte más emocionante, que es cuando alguien dice que me apaña y que hagamos la idea, que pase de ser una maqueta o un storyboard a algo con más forma. Pero para eso hay que bancarse un pequeño parto natural en casa primero.
«La gracia está en esa distancia que hay entre lo copiado y lo que se quería copiar, evidenciar este eterno y bastante exitista ‘querer ser como…’ que todos llevamos muy adentro»
★PRODUCTO NACIONAL★ from chini ayarza on Vimeo.
¿Cuáles dirías que son tus principales temáticas, personajes o relatos?
Gracias a la música pude sacar un lado que tenía como de más desenfado, o al menos de no estar tan de acuerdo con varias cosas que por timidez no me sentía capaz de decir. Al gritar me siento como conectada con las personas que tuvieron sentimientos similares antes que yo.
Visualmente me encantan los colores chillones, intento ser más elegante a veces pero la verdad no me sale jeje. En los videos me gusta mucho imitar a la mala ciertos referentes, como lo fue mi trabajo de tesis criticando la publicidad para mujeres en “Producto Nacional” o el videoclip de Tus Amigos Nuevos “Delfín”.
La gracia está en esa distancia que hay entre lo copiado y lo que se quería copiar, evidenciar este eterno y bastante exitista “querer ser como…” que todos llevamos muy adentro, pero a través del humor. En el caso de la tesis sería como la publicidad nos exige a Latinoamérica unos estándares de belleza de la mujer primermundista, y en el del videoclip, el que algunas bandas se quieran ver “cool” a todo costo, si bien que es considerado “cool” cambia cada año y no es necesariamente vanguardista, por lo cual quise hacerlo con videos muy pasados de moda de los años 80.