Explorando la inmediatez y paradojas de las relaciones humanas modernas, Fiebre presenta Venuz, obra en la que sondea las vicisitudes del amor líquido.
Entrevista por Marisol Martínez
La conexión entre el hombre y la tecnología despierta una fascinación profunda. Surge de la necesidad del ser humano por trascenderse, perfeccionarse y explorarse a sí mismo, revelando un sendero que conduce al florecimiento del alma. En el caso de Fiebre, cantautora ecuatoriana de 31 años de edad, lo anterior no es menos cierto, ya que la tecnología ha sido uno de los pilares que sostienen los cimientos de su carrera y alimenta su infinita curiosidad.
En ‘Venuz’, su última obra corta del 2023, la simbiosis entre espíritu y ciencia se manifiesta en la reimaginación de la diosa romana del amor, la belleza y la fertilidad, que choca de frente con las máquinas, algoritmos y circuitos modernos. Nos ofrece una visión particular sobre la manera en la que nos relacionamos en el siglo XXI, en plena era del afecto líquido. Platicamos con Fiebre sobre esta y otras visiones personales, de cara al año que recién comienza.
“Ser Ruidosa es tener una identidad fuerte, que se pueda manifestar también de manera sutil. Estar conectada con mi propia personalidad y saber comunicarla. Sentir empoderamiento de exponer lo que siento, lo que pienso, mi arte”.
Entre lo Urbano y lo Pop
En lo teórico, Fiebre surge de la combinación del nombre y apellido de Fernanda Bertero (FeBer; fever en inglés). Pero en lo práctico, encarna la fiebre emocional que llevó a Fernanda a reconectar con su feminidad y transgresión para darle vida a un nuevo proyecto musical. Antes, ya había probado suerte con Biotrash, un dúo de pop experimental que representaba una suerte de alter ego, “una mujer máquina con dos micrófonos y sintetizadores”. Algo más cyberpunk. Fever, por otra parte, nace de la honestidad y la necesidad de empoderamiento. Algo más orgánico.
“La relación hombre – tecnología siempre me ha fascinado. Aprendí a hacer música por mi relación con la tecnología. Empecé a usar Live o a ver tutoriales de YouTube. Fue todo como una navegación muy desde ahí, no desde lo académico, sino desde lo exploratorio. Y al final fue como una herramienta para ahondar en mis emociones y comunicarlas”.
En un mundo que no sabe girar sin etiquetas, suelen encasillar a Fiebre en el soul, R&B, dembow y trap, aunque ella prefiere situarse en una categoría más ambigua, entre lo urbano y lo pop, que da espacio a la expresión de lo ecléctico.
El Impacto de “Rush” en ‘Rebelde’
Hay que dejarlo claro, la escena musical ecuatoriana efervesce en puntos neurálgicos como Quito, Guayaquil, Riobamba o Cuenca; sin embargo, la mayor parte de los oyentes de Fiebre en Spotify viven en la Ciudad de México. Es algo que no sorprende por dos razones específicas: primero, el amplísimo y diverso perfil del público mexicano; segundo, su participación en ‘Rebelde’ de Netflix, el remake de la icónica telenovela mexicana que marcó a toda una generación en la década de los dos mil.
“Rush” suena en el octavo y último capítulo de la primera temporada de ‘Rebelde’, ambientando un tímido y provocador beso entre los personajes de “MJ” y “Dixon”. En este sentido, “Rush” significó varias primeras veces para la cantautora. Fue el sencillo debut en su nueva piel como Fiebre, y también la consolidó como la primera ecuatoriana en formar parte del soundtrack de una serie de Netflix. Más tarde, el tema aparecería en su primer álbum, ‘Petróleo’ (2021).
“Ya tenía esa canción, ya estaba fuera. Alguien la escuchó y ese alguien me escribió por Instagram. No parecía algo tan serio, me habló de una serie mexicana, y pensé que saldría en televisión. Luego mi abogado me dijo que era para Netflix. Fue algo surreal y al final súper hermoso”.
‘Venuz’, la Diosa Futurista del Amor Líquido
Mucho se ha dicho ya sobre la inmediatez que rodea a las relaciones humanas contemporáneas. A pesar de experimentar un nivel de conectividad sin precedentes, irónicamente, el mundo se ve amenazado por una epidemia de soledad que podría convertirse en uno de los mayores males de la sociedad moderna. Con un enfoque futurista y romántico, Fiebre retoma este motivo en ‘Venuz’, su último EP.
“Tiene que ver con este otro tema que a mí me apasiona mucho, que es la tecnología, todo va muy rápido y da la ilusión de que nos conectamos más con la gente, pero realmente solo estamos más individualizados. Todo es mucho más superficial y en verdad la gente no trabaja en sus relaciones. La forma en la que consumimos en general nos afecta en cómo nos relacionamos con el amor, porque lo consumimos como si fuera cualquier otro producto”.
Existe una narrativa intencional entre ‘Venuz’ y su antecesor, ‘Feroz’ (2022). De ahí que el primero lleve una “z” al final, para que se entienda como un complemento contradictorio de su material hermano. Confronta la lucha, la rebeldía y la ira que caracterizaron a ‘Feroz’, con la fertilidad, el amor, el cuidado y la comodidad de ser una misma en ‘Venuz’.
“En ese ámbito, ‘Venuz’ vino a refrescar todo lo que había pasado con ‘Feroz’. Venus viene a ser como la diosa del futuro porque se está acabando el agua, las relaciones cada vez son más líquidas y el amor se entiende cada vez menos. Entonces tendría sentido, conceptualmente, que Venus sea la diosa del futuro”.
Lejos de lo temático, Fiebre encontró inspiración instrumental en otra musa, Caroline Polachek. Aunque la carrera de Polachek se remonta a su época universitaria, alcanzó el éxito mainstream solo hasta el 2023, a los 38 años edad, con el disco ‘Desire, I Want To Turn Into You’. Ahora, algunos se atreven a llamarla la “Kate Bush de la Gen Z”.
“Estaba escuchando música italiana contemporánea. Otra artista que resonaba sonoramente conmigo era Caroline Polachek. De ahí saque inspiración de sonidos más épicos o narrativos que te hacen entrar en una onda un poco más cinematográfica. Me gusta mucho que las canciones tengan este carácter de transportarte, quizás, a otros mundos”.
Romper el Dique de la Brecha de Género
Reducir a Fiebre tan solo a cantautora es un error. Realmente estamos hablando de una artista multidisciplinaria pues, además de componer y cantar, también se desempeña como artista visual, directora de arte y diseñadora de modas. De este último rubro destaca Liebre Clothing, marca propia que explora la flexibilidad y la libertad a través de prendas sin etiquetas de género.
Es justamente el dique de la brecha de género el que, desafortunadamente, aún no se puede romper en la industria musical. Con cierto dejo de amargura y descontento, Fiebre recuerda aquella ocasión en la que cancelaron su participación en un festival ecuatoriano, argumentando falta de reproducciones. En su lugar, invitaron a una banda masculina cuyos números eran inferiores a los suyos.
Y es que, ¿los números son tan importantes? “Interiormente no es algo que le importe a mi alma o a mi corazón”, asegura. “Pero a la hora de dialogar con gente de la industria, entonces hay que hablar ese lenguaje. Hay que estar consciente de que es algo que importa en el negocio”.
“Aún hay mucho desequilibrio y muchos tratos diferentes. Los carteles son ridículos, no en el sentido de que la música sea mala, sino debido al bajo porcentaje de mujeres que observo, con un máximo del 20%. Y hay tantos proyectos femeninos de calidad de los que podrían escoger. Muchos se excusan diciendo que no hay suficientes exponentes o que no son conocidas, pero también es verdad que ahora hay mucha más visibilidad. Entonces, es un poco triste que aún se escuden con ese tipo de ideas”.
2024: Un viaje musical inexplorado y un nuevo álbum en el horizonte
Después de un prolífico 2023, en el que prosperó tanto como cantante, como creativa y como persona; 2024 aguarda con mucha más exploración, experimentación intuitiva y concepción artística. Será el año en el que lance su segundo esfuerzo de larga duración, marcado por la búsqueda de nuevos horizontes sonoros.
“Este año viene súper fuerte porque voy a lanzar mi segundo álbum. Estoy muy entusiasmada porque, en este proceso de experimentación, finalmente encontré algo nuevo que suena a mí, pero diferente. Con ritmos fusión que no había explorado antes como el funk brasilero, el dubstep, entre otros. Cosas que quizás no son tan obvias. Entonces se viene eso, sencillos y el álbum”.
Shoot editorial exclusivo para RUIDOSA
Créditos:
Artista @1800fiebre
Dirección Creativa @carolina.veldi
Fotógrafa @imago_natalia
Wearing @liebre_clothing @john_creative_
Agradecimientos @cspressag, Martha Estrada, Gris Onofre